Ruta corta y larga de Agana
En la vertiente más secreta de La Gomera se esconde una ruta que combina leyendas, paisajes mágicos y formaciones geológicas únicas. Desde los míticos Chorros de Epina, el recorrido nos lleva entre miradores solitarios, caseríos tradicionales y curiosidades geológicas como los anillos de Liesegang o el mega deslizamiento de Tazo. La variante corta desciende hasta el mirador de Punta de Alcalá, con espectaculares vistas al océano, mientras que la opción larga atraviesa el mayor palmeral de Canarias, en Tazo y Alojera, hasta llegar al encantador pueblo de Taguluche, protegido por riscos y abierto al Atlántico. El regreso exige esfuerzo, pero regala panorámicas inolvidables.
Una ruta para MTB o gravel que invita a descubrir el lado más auténtico, salvaje y desconocido de la isla.
Recorrido
Desde el mágico paraje de los Chorros de Epina, rodeado de leyendas y frescura, comienza una ruta ciclista que combina aventura, historia y naturaleza. El camino atraviesa bosques de sabina y paisajes modelados por millones de años de volcanismo, como los curiosos anillos de Liesegang, el gran deslizamiento de Tazo o los lomos colorados de Chijeré. Cada tramo revela la huella del tiempo y de quienes habitaron estas tierras. El recorrido nos lleva a ermitas escondidas como la de Santa Clara, miradores colgados sobre el Atlántico, y caseríos con sabor auténtico como Tazo, considerado el mayor palmeral de Canarias, o Alojera, cuna de la miel de palma. Más adelante, el camino se abre hacia Taguluche, un valle secreto protegido por riscos, donde el silencio y el océano marcan el horizonte infinito. Ya sea en la variante corta hacia la Punta de Alcalá o en el itinerario largo que enlaza pueblos y palmerales, esta ruta para MTB y gravel es un viaje por los paisajes más singulares y salvajes del norte gomero, donde cada pedalada conecta con la esencia profunda de la isla.
